#TheLoveWitch Feminismo efectivo al estilo vintage


El cine independiente del año pasado fue muestra de lo que aún tiene por decirnos, claro ejemplo es la película The love witch, que haciendo homenaje a las cintas de los años 70's, mezcla comedia, drama, ironía, sensualidad y feminismo altamente astuto y divertido que sin duda lleva a la reflexión profunda sobre el papel de la mujer actual.







¿Cómo logra sostenerse esta película y abarcar tantos géneros a la vez? Simplemente es brillante, The love witch nos retrata a una joven bruja que hará hasta lo imposible por encontrar el amor, incluso hasta usar cualquier hechizo y llevarlo hasta sus últimas consecuencias, aunque esto le pueda traer serios problemas.



Ingeniosa, divertida y elegantemente sarcástica, esta cinta refleja ese pasado que la mayoría de mujeres ocultan -por vergüenza-, al volverse una enferma enamoradiza, y que por otro lado también dibuja aquellas fantasías y deseos que el hombre cocina al imaginar a "la mujer perfecta".     




Se preguntarán, ¿cómo es que una bruja tan bella necesite usar de la magia para tener a su lado a un hombre? Sin hacer spoilers, el personaje de Elaine; nuestra bella protagonista, esta construido entre todos esos errores y prejuicios que hasta hoy se tiene sobre la conducta de la mujer hacia el amor. Confrontando al espectador, entre risas y chistes sarcásticos, nos hace cambiar esa perspectiva que tenemos al tener una relación de pareja, y de aquellos fantasmas que nos persiguen toda la vida llamados ex.     



Sus escenas con desnudos no llegan a lo obsceno, destacando el valor visual que aporta cada escena y encuadre de la cámara que en conjunto con sus diálogos de cada uno de los personajes, hacen que jamás se pierda esa magia que tenían aquellos filmes de la época de los 70's refrescando a este género y llevándolo a un nuevo nivel. 



¿Porqué es tan innovadora y efectiva esta propuesta de feminismo en la pantalla grande? Durante cada minuto al observar la sexplotation que nos enseña su protagonista, el argumento de la cinta jamás se corrompe. No existe la reivindicación, no existen lecciones morales ni finales mágicos, por el contrario el desenlace muestra aquel lado humano que podría tener esta ficción femenina.   



Es de rescatar el gran acierto por elegir la belleza, mirada y peso actoral de Samantha Robinson que como protagonista nunca decepciona, aunque lamentablemente le sobran los casi últimos 20 minutos de la cinta donde se pierde aquella magia que hechizan al iniciar de verla.   


Dato curioso es que desde el inicio hasta el final me hizo pensar a Lana del rey ¿por qué será? Ja, ja, aún así no dejen de ver la historia de esta bruja tan encantadora.


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