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Hombres trans, la nueva era del porno gay

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La apertura de gustos en la actualidad se ha diversificado a tal punto que internet se ha convertido en el canal perfecto en marcar tendencias de consumismo del presente y futuro. Moda, productos, arte, música, entretenimiento o medios de comunicación son algunos que han encontrado en el ciberespacio un público bastante rentable dispuesto a gastar tiempo y dinero por encontrar aquella novedad que los deje enganchados. Hoy en especial, hablaremos de una industria que quizas sea la más beneficiada, sólida e inmensamente millonaria por esta situación, siendo famosa por siempre estar en la vanguardia social y tecnológica: el porno. 




Resulta sorprendente enterarse que la propagación de grabar vídeos en formato Super-8, el auge del uso de VHS en los años 80's, la realización de pagos online, el aumento de ancho de banda de internet y hasta los primeros experimentos de realidad virtual esten influenciadas por esta industria, que al año produce cerca de 8 mil millones de euros tan sólo en Estados Unidos. Sin embargo, para conseguir estas ganancias se ha necesitado de la creación y ejecución de miles de propuestas que aborden las distintas necesidades del público para seguir consolidandose como la buena industria que se sigue manteniendo vigente. Justo en este punto es cuando entramos con el porno gay.

Músculos, fetiches, razas e innumerables posiciones sexuales han sido ya cumplidas para este público cada vez más demandante de buenos contenidos. En este sector, los actores de las cintas para adultos ya son considerados más que estrellas de rock, pero ¿qué le espera al futuro del porno gay? Sin sonar moralista, es una sorpresa confirmar que sea la comunidad trans los que comanden esta nueva era de entretenimiento para adultos.  


Pasando por las categorías de latinos, daddy's, twinks, gang bang, o fisting, hoy parece que la comunidad gay ha decidido compartir similitud de gustos con los hombres heterosexuales, por lo menos, los del continente americano. Mientras que a los heteros en sus búsquedas favoritas se encuentran las palabras "mujeres con pene", para los hombres gay ahora se encuentran los "hombres con vagina", así es.  

¿A qué me refiero con "hombres con vagina"? Dos palabras: chicos transexuales. En concreto, son aquellas personas que nacieron identificados como mujeres por su composición biológica pero, llevaron a cabo una serie de procesos y transformaciónes físicas y mentales para identificarse actualmente como varones.  


Fantasía, morbo y excitación son conductas que han llevado a estos cibernautas a buscar este tipo de materiales audiovisuales donde gustan de observar como practica el sexo una persona que mezcla las anatomías de los dos géneros: masculino y femenino. Curioso que sea dentro de esta industria donde se generen el doble de ingresos económicos que en las descargas de música.    

Sitios como Jock Pussy y su actor estrella Luke Hudson, o Transpassword y su actriz Karla Carrillo -ambos transexuales-, apuestan por este tipo de mercado que ha confirmado que el porno sirve como ejemplo de adaptación a la modernidad, de innovación y de progreso tecnológico. En México nos encontramos situados entre los diez primeros países de todo el mundo que ven pornografía a través de internet, dedicando 9 minutos de cada sesión en una página porno, gastando aproximadamente 6 mil pesos al año en esta realidad alterna que asegura, en la mayoría de los casos, satisfacer sus pensamientos más prohibidos sin temor a ser juzgados ¿Será esto solo el inicio de aquella libertad sexual que por tanto tiempo se nos ha negado?  
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